Capitulo 1 ~ Primer día de escuela

Narra Ivana

Soñaba profundamente, era un sueño hermoso, encontraba a mi príncipe azul, mi verdadero amor, era tan lindo, tan real, pero los rayos del sol que entraban por las aberturas de las persianas de mi ventana tocaron mi cara e hicieron que el calor llegara de la nada, lo cual hizo que abriera mis ojos y me diera cuenta de que no era más que un simple sueño.  Tomé la almohada en la que mi cabeza estaba recostada y la puse fuertemente en mi cara, después de 10 segundos, alcé medio cuerpo, apoyando mi brazo izquierdo en la cama para no caerme, estaba tan cansada, miré el despertador que estaba en la mesita de noche del lado izquierdo de mi cama y marcaba las 6:30 am. Maldije el día, no entendía porque me había despertado así, el sol ya salió y aún no son las 7 de la mañana y entonces  recordé algo que hizo que pasara por todo mi cuerpo un escalofrío, ¡Era Lunes! Volví a tirarme a la cama, puse mis manos sobre mi cara, tapándola, hasta que escuché un grito, era mamá.

-¡IVANA! ¡KATYA! – Gritó mi mamá desde abajo, en el primer piso. – ES LUNES, ¿RECUERDAN? PRIMER DIA DE CLASES. – Seguía gritando.

¿Había escuchado bien? Primer día de clases, es cierto, pero no puede ser, no quiero entrar a una nueva escuela cuando el curso empezó a 4 meses, pero tenía que hacerlo.

Froté mis ojos con los dedos y me paré lentamente, me quedé sentada en la orilla de mi cama cuando mi mamá entro de sorpresa a mi recamara.

-Ivana, Hija, - Dijo mientras abría la puerta de mi cuarto. - es tu primer día de clases en el colegio nuevo y no quiero que llegues tarde. – Concluyó y cerró la puerta.

Tuve que levantarme, pues no soportaba los gritos dramáticos de mi mamá. Me levante, caminé hacia la puerta de mi cuarto con flojera, arrastrando los pies, la abrí y me dirigí al cuarto de Katya, el cual se encontraba del lado izquierdo del mío. Toqué la puerta y al ver que no abría entré. Estaba acostada en su cama completamente dormida.

-Katya, Katya. – Decía mientras la movía de un lado a otro con mis manos para poder despertarla. – Es tarde, primer día de clases, levántate. – Grité-

-¡YA IVANA! – Gritó, mientras se movía para verme. – Entendí, ¿sí? Ya voy. – Dijo a la vez que se levantaba de su cama.

Salí de su cuarto y fui a mi baño. Me duché, el agua estaba tan fría que el sueño se me quitó en un abrir y cerrar de ojos. Al terminar, me puse mi abata blanca de baño, salí y comencé a vestirme.

Al terminar, fui al cuarto de Katya y ya estaba lista, sin duda esa chica se vestía muy rápido. Bajamos juntas, pero ya era muy tarde así que ni siquiera tiempo de desayunar nos dio, por lo que  lo único que probamos en esa mañana fue un delicioso jugo de naranja que mi mamá nos había preparado. Rápidamente nos colgamos la mochila y subimos al auto de mamá, pues papá ya se había ido a trabajar.

Mi mamá condujo lo más rápido que pudo, enserio ya era tarde.  Katya y yo íbamos en la parte de atrás del carro, lo único que veíamos eran como los autos y algunas personas pasaba rápido frente a nuestra vista, íbamos tan rápido que el aire nos despeinó por completo.

-¡MAMÁ! – Grité mientras subía el vidrio de la ventana. – Baja la velocidad, me despeiné toda. – Pedí.

-Ash, basta de quejas que ustedes tienen la culpa. – Dijo mamá en tono de regaño.

-¿NOSOTRAS? – Preguntó Katya alzando su voz.

- Si, por levantarse tarde. – Respondió mi mamá mientras movía el retrovisor para vernos. – Bueno ya, arreglen su cabello que llegamos. – Dijo  señalando nuestra nueva escuela.

Katya y yo rápidamente nos pusimos en la ventana, cada una en la del lado en que se encontraba, miramos la que sería nuestra nueva preparatoria y nos llevamos una sorpresa, ESA ESCUELA ESTABA GIGANTE.

-¡WOW! – Gritó Katya. – Será Increíble, ¿no Ivana?- Me preguntó.

- Aja sí. – Respondí un tanto perdida mirando la escuela de lo grande que estaba.

-¿Que Pasa Ivi? – Preguntó mientras me miraba.

-No no nada. – Respondí nerviosa. – digo, mientras no nos perdamos ahí. – Le dije. Katya y mamá soltaron una risita burlona.

-¡BUENO YA, QUE ES TARDE! – Dijo mi mamá mientras nosotras bajamos del auto. – ¡Suerte hermosas! – Concluyó antes de que cerraramos la puerta del coche.

Y ahí estábamos, Katya y yo, paradas, nerviosas, nos temblaban las piernas, no queríamos pero teníamos que hacerlo, debíamos entrar y empezar una nueva etapa en nuestras vidas.

-Bueno Ivi, es hora. – Dijo dando un suspiro.

-Entremos Kat. – Concluí.

Así que sin dudarlo ni pensarlo más,  entramos a Richter High School.

Este es el primer capitulo hermosas, espero les guste, dejen su comentario & pueden seguirme en twitter ~> @ImRosselyJonas Las seguiré de vuelta, solo diganme que leen mi novela :)